dijous, d’octubre 25, 2007

Gris

.
Anochece.
.
Con todo por hacer aún y más pronto que nunca.
Y me quedo, como casi siempre, sentada.
Me canso de pensar todo lo que me queda por hacer. Incluso más que si lo hiciera.
.
Me hablo y me digo: Sonríe. Ponte las cejas-alegres postizas. Polvoréate las mejillas. Mánchate los ojos con betún. Y me lo digo por decir algo.
.
Porque como casi siempre, me quedo sentada.
.
Esperando alguna llamada o alguna novedad en una situación que ya me aburre.
Me bostezo. Apesto. Y me ducho todos los días.
Lo curioso no es la monotonía - a eso me estoy acostumbrando.
Lo curioso es que cada mediodía pienso que no, que hoy será diferente.
Y cada media-tarde la misma mierda.
.
En las mismas paredes.
Conmigo.
Sin mí.
.
Pero hoy no.
Hoy te volveré a buscar.
Como casi nunca.
Desde aquí.
Sentada.
.
Como casi siempre.
.

1 comentari:

Anònim ha dit...

La Nena que yo conozco no se aburre ni se queda sentada, es un culo inquieto incapaz de parar de pensar en el próximo puente y de qué vamos a hacer. Pero también es la que no es capaz de quedarse a solas consigo misma ni dos segundos, porque eso significa tener que dejar la mente en blanco para ocuparse de uno mismo y de lo que siente, y ella es incapaz de dejar de preocuparse por los demás; incapaz también de dejar de tener miedo de sus propios pensamientos.
Tal vez todo esto sea temporal y pronto vuelvas a ser la de siempre, pero espero que aprendas a dejar la mente en blanco y cuando dejes de temerte, y sólo entonces, podrás retomarlo todo donde lo dejaste, dando de verdad un giro a tu vida.

Besitos