divendres, de gener 27, 2012

El invierno por fin

La lluvia por fin amenaza con llenar el fin de semana de excusas para no salir de tu piel.
Haremos canciones con tu guitarra, que son tus dedos, y mi voz, que es tu nombre en una noche de verbena.
Y ya nada será distancia, ni "peros", ni fríos. 
Seremos consuelo de los abrazos perdidos por cada día de la semana que no estuve
que no estabas
y que nos atrincheraron el corazón para resistir otra batalla más:
la del esfuerzo.
Ya no hay lamentos porque ya no hay tristeza. Solo el tenernos nos puede hacer sentir frágiles y por eso te digo
que no.
Que no me rindo.
Que hoy por fin la lluvia ha salido a tu encuentro.