dilluns, de juny 11, 2012

Verano del 2008

Yo no sé si tú sabes
cuántas veces te tuve
sin quererte
y cómo eso repercute en mí
cuando sueño que me gritas
desde el otro lado
de alguna cama que ocupamos
en aquél tiempo que no te quise.
Todavía te recuerdo.
Qué calor aquel verano
se enredaban las rodillas
con el sudor de tus manos
y las cortinas, como abanicos,
dándonos el aire que nos faltaba.
Cuántas cosas nos dijimos.
Mentiras, todo mentiras.
Pena de mí, qué mentirosa,
decir te quiero sin sentirlo.
Pobre de ti, cuánto pronóstico,
decir te quiero sin tenerme.
De ti solo recuerdo
el frío, que llegó luego.
Aún era verano pero yo
estaba tan fuera ya de ti
que no me quedaba nada
del calor que dejaste
aquellas veces que te tuve
[sin quererte]
dentro.

1 comentari:

Oriol Salou ha dit...

Que recuerdos me trae este cuento! de aquellos jóvenes veranos donde llenábamos nuestra soledad sentimental, con alcohol en cualquier lugar y de un afecto forzado por ser verano.