Me gustaba ponerle nombre
a las cosas que nos rodeaban
y llamé
a la cena que nos unió
- hace ya muchos años -,
al perro que no tuvimos,
y a ti en mi boca
Consuelo.
Consuelo por los años que no vendrían,
por las veces que no nos tendríamos,
por las camas que dejaríamos intactas.
No sé qué es de ti y
aunque comparto recuerdos contigo
ya no te conozco.
Sólo quería contarte
que aquí todo sigue igual
aunque ya nada es lo mismo.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada