Muy a menudo me vienen ganas de escribir cosas malas. Un texto feo, de estos en los que se me desagarra el corazón y muestro lo doloroso que es vivir. Me vienen ganas de quejarme por todos aquellos que no me quisieron. Llamarlos cabrones, aunque ya no ocupen espacio en mi vida, aunque solo sean pasados sufridos que no tengo ganas de tener en futuros insufribles. No entiendo muy bien a qué viene esa actitud. Por qué tengo ganas de escribir que estoy mal si estoy bien. Supongo que las tristezas dan para escribir más que las alegrías. Y ahora que todo va bien, es difícil sacar letras. Aunque pensándolo bien, podría quejarme. De nuestros espacios deslocalizados. De las tragedias que nos toca vivir, cada uno desde su lado.
De lo lejos que estás de aquí.
O de lo sola que estoy sin ti.
1 comentari:
cuando se escriben tristezas, es que tristezas siente el corazon. A veces conformarse no es la mejor solución. He dado con este blog de casualidad y debo decir: bonito blog.
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